4 Janvier 2025
La inteligencia artificial (IA) es un campo de la informática dedicado a crear sistemas capaces de simular la inteligencia humana. El estudio de la IA sigue siendo crucial porque transforma diversos sectores, impulsa la innovación y presenta importantes oportunidades económicas al tiempo que plantea desafíos para el mercado laboral.
La inteligencia artificial (IA) tiene varias desventajas notables. Puede provocar pérdidas de empleos al reemplazar tareas humanas, exacerbar los sesgos y la discriminación presentes en los datos y plantear problemas de seguridad y confidencialidad de los datos. Además, una mayor dependencia de la IA puede disminuir la capacidad de operar sin la tecnología, mientras que los costos de desarrollo limitan su adopción a las grandes empresas. Por último, las cuestiones éticas relacionadas con la toma de decisiones automatizada y su impacto en las habilidades requeridas resaltan la necesidad de una gestión cuidadosa y una regulación adecuada.
En 2024, el mercado mundial de inteligencia artificial (IA) estará valorado en 176.400 millones de euros. Las previsiones indican un crecimiento explosivo del 1.400% en los próximos siete años, con una valoración proyectada de 1,63 billones de euros para 2030. Esta expansión representa una tasa de crecimiento anual compuesta del 37,3% de aquí a hoy y al final de la década, según Grand View Investigación. En 2018, el mercado de IA generó solo 9 mil millones de euros al año. Con un mercado global de 294.300 millones de euros en 2024, la IA se está posicionando como un importante motor de innovación y competitividad.
Las empresas de todos los tamaños están adoptando IA para automatizar tareas repetitivas y reducir los costos de producción. Se espera que para 2025, 97 millones de personas trabajen en el campo de la IA. Actualmente, el 83% de las empresas consideran la IA como una prioridad estratégica para los próximos años. Empresas como Netflix están aprovechando la IA para ofrecer recomendaciones personalizadas, generando ingresos de 38.700 millones de euros al año. La integración de la IA en la fabricación podría aportar hasta 3,4 billones de euros a la economía mundial en 2035.
El impacto de la IA en los empleos y las habilidades profesionales parece significativo. Se estima que hasta el 16% de los empleos en Estados Unidos podrían ser reemplazados por sistemas automatizados en menos de cinco años. Sin embargo, el 81% de los empleados ve la IA como una oportunidad para mejorar sus habilidades profesionales. En Francia, el 97% de los adultos jóvenes están familiarizados con la IA, mientras que solo el 51% de las personas de 75 años o más lo están. A pesar de estos avances, el 60% de los profesionales están preocupados por la posibilidad de que su puesto de trabajo sea sustituido por la IA.
La inteligencia artificial, si bien ofrece oportunidades considerables, también presenta desafíos importantes, como pérdida de empleos, prejuicios y problemas de seguridad. Para maximizar sus beneficios, es fundamental abordar estos inconvenientes con una regulación adecuada, una gestión ética y estrategias para equilibrar la innovación con la protección de los derechos y los empleos.